Tras el desalojo en Merlo, Ritondo valoró el "trabajo en equipo" con el municipio

El ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, supervisó ayer el operativo de desalojo de los terrenos tomados hace cuatro meses por casi dos mil familias en el partido bonaerense de Merlo y destacó el "trabajo en equipo" de la Provincia y el municipio.

"Se hizo un trabajo prolijo y ordenado en tierras que había que recuperar y volver a ocupar. En las tierras ocupadas no vivía dignamente nadie: no hay cloacas ni agua potable, no hay electricidad es decir que no es un lugar apto para vivir”, señaló Ritondo, que recorrió el predio junto al jefe de la Bonaerense, Pablo Bressi.

En ese sentido, dejó en claro que “había una usurpación y tuvimos que resolverla, gracias a la justicia y al trabajo que se pudo hacer con el intendente de Merlo”, Gustavo Menéndez.

Asimismo, Ritondo subrayó que “los dueños de las tierras, que son privados, se tienen que hacer cargo de la custodia. Tienen la responsabilidad de alambrar estas sesenta hectáreas”.

Finalmente, indicó que “los trabajadores de desarrollo social se encontraron con mucha gente que no es de Merlo, que vinieron del interior de la Provincia. Se desalojó sin heridos, sin balas de goma y gracias al trabajo en equipo entre Provincia y el intendente Menéndez”, finalizó.

El procedimiento se inició ayer a la madrugada cuando unos 1.200 agentes cercaron el predio ubicado al costado de la ruta 1003 y comenzaron a ir casilla por casilla para pedirles a los ocupantes que voluntariamente dejaran hogares.

Uno de los delegados de la toma, Rodrigo Alonso, denunció que el operativo incluía la utilización de "topadoras" que arrasaban "las casas" y que "ni siquiera" podían retirar sus pertenencias. "Con topadoras arrasan las casas y ni siquiera podemos retirar nuestras pertenencias, como camas, heladeras y colchones", indicó en declaraciones a la agencia DyN.