La interna del Frente de Todos en horas cruciales

“No se puede hacer peronismo sin Cristina” y el pedido de romper la proscripción “como la gran armadora”

El plenario “Luche y Vuelve” dejó varias lecturas en Avellaneda: mientras el operativo clamor por Cristina Presidenta fue el gran protagonista, Máximo Kirchner pidió que la vicepresidenta “vuelva” de la proscripción para que sea la gran armadora del Frente de Todos.



Luego de jornadas donde la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner fue protagonista y oradora en varios actos, llegó el momento de profundizar el operativo clamor: la Universidad Tecnológia Nacional (UTN) de Avellaneda fue la sede del plenario “Luche y Vuelve” que congregó a una buena parte de la dirigencia y militancia que pide que Cristina sea candidata a Presidenta, no sin antes romper la proscripción. Pero en el camino...hubo un mensaje que no pasó desapercibido.

Con críticas a Alberto Fernández y a la “mafia” del Poder Judicial, Máximo Kirchner dio la sorpresa al pedir por Cristina pero en otro rol, el de armadora de la estrategia electoral tal como sucedió en 2019, cuando se creó el Frente de Todos, Alberto Fernández encabezó la lista y triunfó en los comicios.

Los principales oradores fueron Máximo Kirchner y el gobernador Kicillof, con un discurso que respetó el camino para que Cristina “cambie su decisión” y presentarse como precandidata a Presidenta dentro del espacio oficialista.



Kicillof abrazó “el calor de la militancia” y dejó una de las frases de la jornada: al cumplirse 50 años del triunfo de Héctor Cámpora tras los casi 18 años de exilio del general Perón, que hubo entonces “algunos vivos que pensaron que se podía hacer un peronismo sin Perón. Hoy no se puede hacer un peronismo sin Cristina”.



Acusó que “el año pasado se fue preparando este año, como hicieron en 2015 y 2019. Todo fue orquestado y preparado desde marzo del año pasado, cuando apedrearon el despacho de Cristina Kirchner. En mayo, como si fueran espontáneos, se armaron estos grupos como ‘los copitos’. Se creen que pueden engañar toda la vida y todo el tiempo. Cristina nos ha enseñado que todo pega con todo y todo tiene que ver con todo. Nosotros queremos castigo para los que prepararon y financiaron el atentado contra Cristina Kirchner”, pidió a viva voz el mandatario provincial.

En el repaso sobre lo sucedido para terminar con la proscripción de la vicepresidenta, dijo que hubo “conspiración y terrorismo económico” por parte de exfuncionarios de Juntos por el Cambio. “Cuando renunció el exministro Martín Guzmán se armaron corridas económicas. Eso fue en junio. En agosto, fiscales hicieron un show mediático en contra de Cristina Kirchner. Luego llegó septiembre, donde armaron una sensación de que había odio en la sociedad y desembocó en el atentado que sufrió”.



“No sé quién tuvo oportunidad de ver ese fallo. No pudieron sostener ninguno de los argumentos que presentaron los fiscales. Eran puro humo. Ese mes de diciembre, el 21 de diciembre, dos jueces de esa Corte se ‘manotearon’ los recursos, no solo de nuestra provincia, sino de todos los argentinos”, se quejó Kicillof y dijo que con él se busca “acumular más poder en una sola ciudad contra todo el resto de la Argentina”.

Kicillof aseguró que jueces y medios son “una mafia” que viene en “busca de los derechos de todas las personas” y que buscan “la proscripción” de Cristina Kirchner.



“Sabemos lo que van a hacer si ganan. Aunque lo oculten y los escondan, es nuestra obligación como militantes recorrer todas las escuelas, y explicar que hay que bajar al territorio. Hay que dar la discusión. Sin vergüenza, sin esconderse, porque no tenemos nada que esconder”, dijo el Gobernador.

En su momento más álgido del discurso, dijo que a pesar de que “han estado mintiendo, ensuciando y embarrando” no pueden “evitar que la compañera Fernandez de Kirchner sea la dirigente en la que nuestro pueblo cree y que confía. Por eso, como ya no les alcanza con mentir y embarrar, ahora dieron un paso más que es el de la proscripción”.

“Estuvieron años inventando causas y juicios y cuando logran una condena y publicitar como si fuera el resultado de un juicio justo que Cristina es culpable de algo sin ninguna prueba. Son tan cobardes, que ahora tiran la piedra y esconden la mano. Quisieron durante años la proscripción de Cristina. Es un trabajo en el que vienen pergeñándose hace muchísimo tiempo. No les alcanzó con ensuciar que ahora tienen el elemento que creen que les sirve para proscribir a Cristina”, cerró sobre ese tema.

Kicillof, cerró: “La proscripción se rompe levantando nuestra voz, organizándonos, con militancia, compromiso con el pueblo en la calle. Se rompe diciendo que al peronismo no le van a condicionar sus candidaturas ni las presidencias, que si el pueblo quiere a Cristina va a ser Cristina”.





Máximo Kirchner, a su turno, fue mucho más crítico de dirigentes como el Presidente Fernández y pidió romper con la proscripción a Cristina pero para que ocupe otro lugar: “muchos se valieron del triunfo de 2019 para acceder al poder y ahora se hacen los distraídos para hacer lo que tienen que hacer”, se quejó Máximo Kirchner sin mencionar a Alberto Fernández.

“Parece mentira que tras la persecución judicial y el hostigamiento mediático, haya compañeros más interesados en ganarle a Cristina, que en que el país salga adelante”. Y fue más allá, pero sin nombrarlo: “Hay algunos que todavía dudan en abandonar sus aventuras personales”, agregó en referencia a Fernández para finalmente pedir “más humildad”.

Más allá de su oratoria donde repasó el trabajo que buscan y el país que aspiran a proyectar desde un movimiento popular, fue constante en la crítica a Fernández: “Si nuestro frente político hubiera tenido mayor decisión, mayor coraje, la negociación (con el FMI) se hubiera dado de otro modo" dijo, en referencia a uno de los detonantes de, por ejemplo, la renuncia como presidente del bloque en la Cámara de Diputados de la Nación. "Ojalá nuestro Gobierno hubiera explicado por qué accedió a un acuerdo. No diciendo que era el mejor acuerdo del mundo y que iban a venir milagros".

En otro de los pasajes importantes, curiosamente le respondió al gobernador Kicillof y generó uno de los contrapuntos internos del propio acto que tenía un pedido único, pero varias miradas en ciertos temas: “No hay que bajar al territorio gobernador, hay que subir a la militancia”, le dijo.



Las pistas arrojadas en el acto demostraron que el final de una posible Cristina Presidenta está tan abierto como también plagado de variables: desde la armadora que no juegue, a la armadora que le ponga el cuerpo, como en 2019. 


COMENTARIOS