El peronismo se rearma (y desarma)

Larroque encendió la mecha y otra vez explotó una interna en el peronismo

Con un fuerte contenido autocrítico, pidió dejar de criticar a Kicillof “que seguimos rumiando sobre una figura que ya ha ganado dos elecciones” y trabajar para reconstruir la fuerza. Lo cruzó con dureza Mariano Recalde, y el massismo salió a contestarle al porteño.



El peronismo atraviesa horas de discusiones y rearmados luego de la derrota electoral de 2023 y, en paralelo, el avance de la motosierra de Milei que, como parajoda, tiene aceptación en la sociedad. Andrés “Cuervo” Larroque, ministro bonaerense, hombre importante de Kicillof y distanciado de otros dirigentes peronistas –muchos de ellos de La Cámpora- encendió la mecha del peronismo que continúa con diferencias y sin rumbos claros.
 
Salió a aclarar algunos dichos que expresó, envalentonado, en el acto en la Quinta de San Vicente a 8 años de la caravana a Comodoro Py en defensa de Cristina Fernández de Kirchner. Allí, entre otras cuestiones, apuntó contra “el que conspira contra Axel (Kicillof) en una joda extraña está” y además “¿Qué es la conducción de Cristina (Fernández de Kirchner), que tres ñatos te manden un WhatsApp? Yo no quiero esa conducción con movimiento popular, con cuadros auxiliares de conducción, mesas de conducción con debate con programa con método y movilización” con un sugerente destinatario: Máximo Kirchner.
 
Horas después, y en diálogo con Futurock, Larroque aclaró que encuentra la necesidad de que “el peronismo sea amplio y valorar a los compañeros y compañeras que son una esperanza para el futuro” en una referencia clara al gobernador Kicillof.
 
“Es una discusión necesaria, bastante está soportando esta sociedad con el padecimiento de las políticas del gobierno nacional de Milei. Una forma de encontrar una salida es revisar lo nuestro espacio para poder ser una alternativa de futuro. Todos tenemos que poner las barbas en remojo y rediscutir cómo seguimos hacia adelante” dijo, pidiendo fin al estado de quietud del peronismo por el que se lo critica mientras el liberal libertario lleva sus políticas de motosierra y licuadora.
 

“Si alguien tiene algo que decir que salga de la catacumba, de la madriguera, de la cueva, porque la conspiración nos ha hecho mucho daño, Milei es presidente”.


 
Incluso, admitió que no plantea que Kicillof conduzca al peronismo, y valoró la figura de Cristina Fernández: “todos tenemos un reconocimiento en la figura de Cristina y de ninguna manera se puede atacar a Axel o se puede conspirar. Ha sido puesto en la pictota por el propio Milei”.
 
 “Terminemos, demos vuelta la página y tratemos de poner en valor aquellos compañeros y compañeras que son una esperanza hacia el futuro, no me parece que Axel sea el único, pero me parece que seguimos rumiando sobre una figura que ya ha ganado dos elecciones… no sirven esos auditores eternos que parece que quieren enseñarle a todo el mundo a hacer política”.
 
Pidió “ser más respetuosos de aquellos compañeros que ponen el cuerpo todos los días”.
 
Incluso, y ante la explícita consulta sobre la referencia implícita de Máximo Kirchner en sus dichos, prefirió “no personalizar” y conceptualizó: “es una actitud, un espíritu de cómo hacer las cosas, no hay que personalizarlo, yo también lo habré hecho, pero ya no da para más. Yo siempre fui de la idea de que Máximo tenía que tener un rol protagónico y de conducción, pero cada uno tiene su forma de encarar la acción política”.
 
Incluso, agregó más dirigentes a esta cuestión y señaló que “lo utilizan a Máximo” para “generar tensiones en disputas que no le hacen bien al peronismo, hay compañeros y compañeras que no están mirando bien la película, yo personalmente agoté todas las instancias y ya no nos queda más tiempo”.
 
La respuesta

 

Mariano Recalde, senador nacional por CABA de Unión por la Patria salió al duro cruce de los dichos de Larroque. Llamativamente expresó que “es inexplicable que Milei sea presidente. Todos los días nos sorprende con una bizarreada de locura” se metió de lleno en lo sucedido durante el fin de semana.
 
“Las discusiones internas son más saludables que salir a dar un discurso" dijo en respuesta al ministro Larroque y después lo mencionó de forma explícita: “Me parece extraño que el 'Cuervo' Larroque cuestione los métodos de Cristina, no es a través de WhatsApp como él dice"
 
"Hay que ayudarlo a Axel, él quiere llevar adelante su gobierno con éxito. No es momento de discutir liderazgos" agregó, tratando de dilatar la discusión de las referencias peronistas nacionales.
 

"No entiendo cuando el 'Cuervo' Larroque dice que hay un compañero que anda en una cosa rara, pensé que hablaba de Guillermo Moreno, que es el que cuestiona a Axel todo el tiempo" chicaneó, sobretodo porque Larroque y Moreno se mostraron juntos días atrás, en una reconciliación de los dos sectores peronistas.


 
Finalmente, se corrió de las responsabilidades que llevaron a la derrota a Unión por la Patria en 2023 y dijo que "el candidato de Cristina era Wado de Pedro. El kirchnerismo no tuvo candidato en el 2023".
 
El cruce a Recalde


 
Tras esta última mención, el massismo también salió a exponer las diferencias que tienen puertas adentro del peronismo y mucho más con los dichos de Recalde, invisibilizando la figura de Sergio Massa como candidato presidencial de Unión por la Patria.
 
Primero fue Sebastián Galmarini (hoy uno de los directores de Banco Provincia) que le pidió a Recalde “pensar antes de hablar” además de “ser honesto intelectual para no volver a repetir los mismos errores”.
 

“El candidato de todos fue Sergio Massa porque todos creímos que era la mejor propuesta en un escenario electoral muy difícil” y chicaneó al cerrar: “El encierro no fue una gran consejera en las diferentes ofertas electorales de los últimos años. Si te sirve, te paso los resultados”.


 
Detrás, Rubén Eslaiman, legislador bonaerense, le agregó que “si íbamos a elecciones con otro candidato, en las generales perdíamos hasta la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires, y ni hablar de los Municipios donde además de retener los que gobernábamos nosotros, ganamos en más de una decena de intendencias donde hacía años que gobernaban otras fuerzas”.


 
Se espera, en las próximas horas, más posturas de este tipo para resaltar la figura de Massa no sólo como candidato, sino como ministro de Economía de la última etapa del gobierno de Alberto Fernández.
 
Lo concreto es que, entre nuevas canciones y heridas que no se cerraron, el peronismo no logra unificar una postura concreta para salir a pelear contra la motosierra de Milei. Las diferencias, por ahora, prevalecen.



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