ELECCIONES 2019

Matías Molle: "Con cuatro años más de Cambiemos, va a ser muy difícil reconstruir la Argentina"

El dirigente de Unidad Ciudadana de San Fernando dialogó con Nueva BA sobre la actualidad del peronismo en la Provincia. Las críticas al macrismo y el rol de CFK en el armado bonaerense. Las propuestas para el municipio.



Por Mauro Castro

"Si Cambiemos gana, va a pisar el acelerador", advierte el concejal de San Fernando Matías Molle, que en octubre podría competir nuevamente por la intendencia en la boleta de Unidad Ciudadana. "Hay que tener doble humildad para que eso no pase", reclama, en un mensaje al Frente Renovador en el marco de las conversaciones por la unidad. 

En una entrevista con Nueva BA, Molle analiza la actualidad del municipio que buscará gobernar a partir de diciembre y se mete de lleno en el armado del peronismo bonaerense. Afirma que el diputado nacional Axel Kicillof "creció muchísimo" en imagen, aunque no descarta a los intendentes Verónica Magario y Martín Insaurralde. "Lo importante es lo colectivo", subraya.

El dirigente de La Cámpora, que fue el candidato que representó al kirchnerismo en las últimas dos elecciones, opina también sobre el rol que jugará la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner en el armado de las listas y deja en claro su centralidad en la escena política: "En los barrios es a la única que nombran".

—(El actual intendente Luis) Andreotti anunció que no irá por la reelección. ¿Qué balance hacés de su gestión y en qué considerás que debe mejorar San Fernando?

—Hay muchas cosas que se hicieron bien. Siempre lo reconocimos. Pero no sólo de Andreotti: hace años que las gestiones de San Fernando vienen poniendo un ladrillo sobre otro. En la gestión anterior a la de Andreotti se asfaltó, se pusieron cloacas, luz. Andreotti asumió un municipio de esas características, lo que le permitió hacer un montón de cuestiones de la superficie para arriba: se construyeron túneles, mejoraron los centros de salud.

Hay muchas cosas a seguir. Se hicieron muchos polideportivos, pero por otro lado se abandonaron los clubes de barrio, que también son un núcleo importantísimo. El club de barrio unía mucho a los vecinos y ahora está abandonado. Los subsidios del municipio son muy pocos. Ahí hay una fuerte línea para trabajar.

Por otra parte, en San Fernando hay una gran problemática que es el aumento año a año de las tasas de Seguridad e Higiene y de ABL, lo que ha perjudicado mucho a los comercios y a las pymes, más en una economía en recesión, donde el consumo y los salarios caen. Por eso San Fernando creció mucho en términos de recaudación, porque aumentó de manera exponencial todas las tasas. Y a eso se suman los tarifazos. En las principales arterias comerciales de la zona norte hay cada vez más negocios cerrados.

Hay que continuar las cosas buenas, pero tener una visión moderna para que la ciudad se desarrollo en términos productivos y económicos e impulsar una política de promoción de la actividad comercial.

—El candidato del actual intendente será su hijo, el diputado provincial Juan Andreotti. ¿Hay chances de llegar a un acuerdo con el massismo en el municipio para avanzar hacia la unidad?

—Todavía (los dirigentes del Frente Renovador a nivel local) no dieron pistas de lo que van a hacer, de con quién van a jugar. En muchas ocasiones dicen que si hay un gran acuerdo van a formar parte. Mi temor es que se especule hasta el último día. O sos parte del problema o sos parte de la solución. Y el problema hoy son las gestiones a nivel nacional y provincial. Habría que tener una vocación más grande, no sólo discursiva, de formar parte de la gran unidad que reclama toda la Argentina.

—¿Lo ves factible?

—Hoy todo el peronismo está confluyendo hacia un mismo espacio, más allá de cómo se tense la cuerda en los grandes nombres de cartelera. En términos generales, el peronismo está avanzando hacia la unidad para ganar en octubre. En Tigre, Zamora fue mucho más explícito en su vocación de unidad.

—Algunos intendentes y legisladores se muestran cercanos al PJ bonaerense y al kirchnerismo, pero Massa insiste con que Cristina es el pasado.

—Una cosa son los nombres de cartelera, que tensan porque es la manera que tienen de negociar. Esos nombres van a tensar hasta el último momento, pero por abajo, en el territorio, hay una gran vocación de unidad. No podemos disociar lo local de lo nacional: a ninguna ciudad le va a ir bien si estos muchachos siguen gobernando la Nación y la Provincia.

—¿El contexto económico puede ayudar a que sectores enfrentados en elecciones anteriores pudan concretar acuerdos? 

—Nuestro espacio siempre mantuvo una posición opositora y aparte dijo que esto (la crisis por las medidas económicas) iba a pasar. Pero eso ha hecho que muchos reculen y que no sigan jugando a la ambivalencia de la avenida del medio. Con cuatro años más de Cambiemos, va a ser muy difícil reconstruir la Argentina porque están rompiendo todo. Si ganan, se van a animar a pisar el acelerador. Hay que tener el doble de humildad para que esto no pase.


—Insaurralde, Magario y Kicillof parecen ser los candidatos con más chances para pelear por la Gobernación. ¿Tenés preferencia por alguno?

—Los tres me parecen buenos candidatos. Con Axel se nota un nivel de crecimiento muy fuerte de su imagen. Acá viven pidiendo que venga a dar una charla. Pero yo soy más de los que consideran que si se logran colectivos bien constituidos, con mucho laburo, con cualquiera de los tres candidatos se puede ir a la lucha. Soy de la idea de trabajar bien la base, después cualquiera de los tres son válidos.

—¿Y a nivel nacional? Cristina sigue sin dar pistas sobre su candidatura.

—Es muy notorio el pedido por Cristina, sobre todo en los barrios. No sé quién podría asumir ese rol si no es ella. Si eventualmente decide que alguien tiene que ocupar ese rol, todos vamos a terminar acompañando. La verdad es que es a la única que nombran.

—¿El candidato o candidata del PJ debería contar con la bendición de Cristina para ser competitivo?

—Es que es prácticamente imposible que si Cristina decide no ser candidata quien lo sea no forme parte de este gran acuerdo en el que el kirchnerismo está adentro. Si Cristina no es candidata es porque hay un acuerdo con otros candidatos. Pero la figura de ella es muy potente. No hay figura política contra la que se haya trabajado para hacer tanto daño. La gente reconoce que es ella quien está en condiciones de cambiar el rumbo.

—Sin embargo, el macrismo elige la estrategia de la polarización.

—Es una apuesta, y como toda apuesta puede salir mal. Hoy no hay tanto una estrategia como la que tenían en 2015, estudiada punto por punto; hay más un grupo que apostó a algo y está llevando a todo Cambiemos por esa línea. Imagino que hacia adentro de Cambiemos se debe estar discutiendo si no es mejor que Macri no sea el candidato, pero creo que ese grupo cercano a Macri asumió esta apuesta a todo nada, porque es la única que les queda.


COMENTARIOS